Quedamos en Benahadux y empezamos a subir por la carretera hasta que cogimos el desvío de Alhama. Cada uno subía a su ritmo, luego empezamos a dejarnos caer por las ya conocidas veredas de Alhama, que yo hice la última vez desde Aguadulce con los Chanata bike. Otra vez subida, y bajada por la mitica "piedra", y por las veredas de Gador.
Solo cuatro supervivientes pudimos refrescarnos y comer superbien gracias al "Capricho de Carlos". Ya me van quedado pocas rutas por hacer esta temporada y habrá que elegirlas bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario